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Hoy es mi primer día, mejor dicho, mi primera noche en mi nueva casa.
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Estoy sola, siempre pensé que iba a ser de otra manera
y en un principio sentí cierto reparo o tristeza ... pero NO.
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Guardo en la nevera un buena botella de cava que me reservo exclusivamente para mí y que descorcharé en breve, hasta que las burbujas me lleven al sueño placentero.
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Estoy bien, a gusto, nos tenemos que conocer un poquito mi preciosa casa y yo,
de alguna manera nos elegimos y desde hoy empezamos una nueva relación.
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Mis entrañables e incondicionables amigos me han vapuleado y jaleado,
me han incluso animado a que mi primera noche fuese solo mía,
mía con mi casa, con mi nuevo hogar.
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Nano, me has recomendado que respire el olor de las recientes blancas paredes, que bese este suelo de madera de roble,
que sienta sus vibraciones y así lo estoy haciendo.
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Querido Jose, mi amigo desde siempre, has dicho una frase que nunca olvidaré:
LA VIDA HAY QUE VIVIRLA A LO ANCHO, NO A LO LARGO.
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Y he tomado buena nota de ello, no importa los años que vivamos,
como si son cien.
La vida debe ser ancha, llena a rebosar.
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Asun, mi amiga del alma,
no sabes cómo te agradezco tu ofrecimiento de hoy,
no querías que estuviese sola.
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En esta mi primera noche, va por vosotros,
mis hijas, mis padres,
mi hermano y mis amigos.
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Esta es vuestra casa!
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Anne Bonny
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